EL MADRID GANA AL GALATASARAY CON 10
REAL MADRID 4 GALATASARAY 1
El Real Madrid goleó al Galatasaray en el Santiago Bernabéu y
certificó su clasificación matemática para los octavos de final de la Champions
(4-1). Los de Ancelotti jugaron más de 60 minutos con 10 hombres por la
expulsión de Sergio Ramos, sin embargo, gracias a una gran segunda parte, el
Real Madrid se comió a los turcos liderados por un invitado 'sorpresa', Álvaro
Arbeloa, que marcó un gol y dio una asistencia.
Fue una noche fría en
Madrid. Las bufandas y los abrigos pertrechaban a un Bernabéu que se
preparaba para ver el primer partido oficial del curso sin Cristiano Ronaldo. Aun así, el homenaje preparado para el astro
portugués, que lo vio todo desde el palco que habitualmente suele ocupar su
madre para verle jugar, se produjo. Las caretas con la imagen de CR7 poblaron
una parte del estadio, aunque sin el futbolista sobre el césped la cosa perdió
algo de magia.
Ancelotti, además,
había decidido quitarle una segunda pieza al tridente. Si Cristiano era baja
por lesión, el italiano dejaba a Benzema en el banquillo. Jesé, Di María y Bale formaban esa tripleta atacante que, por cierto, sólo se
mantendría en el campo 27 minutos por la expulsión de Sergio Ramos. Fue
precisamente Bale el que tuvo la primera gran ocasión del partido. Apenas
habían pasado tres minutos el galés tuvo un mano a mano con el portero
visitante. Intentó meterla con el interior de la izquierda pero se pasó de
ajustar y el balón se marchó fuera.
El frío en lo
climatológico se estaba trasladando al terreno de juego. El Galatasaray tampoco
exponía demasiado, y el Madrid estaba en esa fase contemplativa. En estas, Sergio Ramos vio
como Bulut le comía la tostada
poniéndole el cuerpo para encarar a Casillas. El resultado fue el peor posible, falta y
tarjeta roja para el central blanco. Bien es cierto que el toque no pareció tan
excesivo como para que el delantero rodara como una peonza por el campo, pero
el árbitro no lo dudó. El Real Madrid se quedaba con 10 hombres y Ancelotti
quitó a Jesé para meter a Nacho. Esa fue la vida que tuvo el nuevo tridente, 27
minutos exactos.
Como el fútbol suele dar oportunidades para levantarse,
GarethBale eligió la mejor forma
para subsanar su error de la primera jugada del partido. El galés fue el
encargado de patear de forma magistral una falta frontal que tocó el cielo y
acabó en la red del Galatasaray.
Un gran golpeo para un gran gol. Eso sí, la alegría duró menos que un caramelo
en la puerta de un colegio. Drogba filtró un gran pase interior para Bulut, que
superó a Casillas por
bajo en su salida. Apenas un minuto de diferencia fue lo que hubo entre el 1-0
y el 1-1.
La segunda parte le iba a servir al Real Madrid en general,
y a Álvaro Arbeloa en particular, para destapar el tarro
de las esencias. Y es que los blancos, aun estando con 10 jugadores sobre el
campo, jugaron unos grandísimos segundos 45 minutos. Y fue, precisamente, el
lateral internacional el que marcó el camino a seguir para acabar bailando a
los turcos. Arbeloa se vistió
de Cristiano Ronaldo en el minuto 52 para rematar dentro
del área y al primer toque un gran servicio de Di María. Un gol que hubiera firmado
cualquier gran rematador mundial.
A partir de aquí, el Galatasaray se descompuso, y el Madrid
creció. Sin notarse en ningún momento la diferencia de número de hombres sobre
el terreno de juego, los de Ancelotti comenzaron el baile a los turcos. El chotis
volvió a tener como protagonista a Arbeloa, que subió la banda derecha y
asistió a Di María para que éste marcara el tercero con un tiro raso. La
sociedad Arbeloa-Di María obtuvo grandísimos réditos para un Madrid que ya se
veía clasificado para octavos como primero de grupo y por la puerta grande
gracias a una estelar segunda parte que tuvo su colofón con un golazo de Isco, tras dejar sentado a un defensa en el área turca. El Madrid ya es
equipo de octavos de final y lo hizo sin su comandante, demostrando que los
soldados también son de mucha calidad.