RECITAL DEL REAL MADRID FRENTE AL BILBAO
REAL MADRID 3 BILBAO 0
El Real Madrid sumó ayer su tercera victoria consecutiva en
la Liga tras derrotar de forma clara a un tibio Athletic de Bilbao, pese a que
el equipo blanco demostró que continúa lejos del buen fútbol que se presupone
con la llegada al banquillo de Carlo Ancelotti.
El conjunto ‘merengue’ . ofreció un partido excesivamente atractivo en un horario que volvió a atraer a mucho público al Santiago Bernabéu. Enganchado a un Isco que está aliado con el gol en este inicio de campaña, y a una ‘estrella’ portuguesa que inauguró su cuenta de la campaña, más el esfuerzo de un Luka Modric diametralmente opuesto al del año pasado, superó a un rival resquebrajado por el primer tanto del malagueño, y que fue demasiado cándido en la capital.
Ancelotti sentó de inicio a Mesut Özil y dio la batuta en el medio a Sami Khedira y Modric, mientras que Valverde hizo lo propio con Ander Herrera, pretendido por el Manchester United, y con Óscar de Marcos, adelantando a Beñat a la mediapunta y situando en el once titular al recién llegado Mikel Rico. El conjunto vasco, bien colocado y sin renunciar al balón, desactivó el juego ofensivo local, y ni Cristiano ni Isco pudieron recibir balones para crear peligro en los primeros instantes del duelo.
Sin embargo, a ninguno de estos dos futbolistas les hace falta entrar demasiado en juego para demostrar su calidad. El de Madeira puso a prueba a Herrerín y, minutos después, una combinación iniciada por el luso y el andaluz acabó con un gran pase de Benzema al ‘23’ blanco, que no perdonó para tranquilizar al Bernabéu.
El gol aumentó el peligro local en los metros finales, mientras que dejó algo ‘tocado’ a los ‘leones’, que tuvieron la mejor ocasión en un lanzamiento a balón parado de Beñat. A pesar de esa oportunidad, la escuadra vizcaína ya no maniobraba con tanta facilidad y le costaba pisar el área de Diego López.
Además, el conjunto de Valverde recibió un duro golpe cuando el partido se prestaba a poner camino a los vestuarios. Una falta bien ejecutada por Ángel di María la cabeceó Cristiano Ronaldo, que cerró su sequía goleadora ante una de sus víctimas favoritas.
SENTENCIA A LA CONTRA. El técnico extremeño buscó la reacción en la segunda parte, retirando a su pareja de mediocentros para meter al joven Erik Morán y al polivalente Óscar de Marcos, retrasando a Beñat, mientras que el Real Madrid continuó sin controlar el juego, pero con la amenaza de su letal contragolpe.
Los minutos fueron pasando y el choque seguía ‘adormecido’. Los de Carlo Ancelotti, apoyados en el estajanovista trabajo de Modric, aguantaron sin excesivos problemas a su rival, esperando que éste se abriese definitivamente para sentenciar el enfrentamiento al contragolpe. La lógica se impuso, nuevamente ejecutada por el inspirado Isco, que no desaprovechó otro buen pase de un Benzema que parece que despierta, pese a la enorme división de opiniones que despertó en el estadio.
A partir de ahí, el Real Madrid, con Jesé en el campo, pudo aumentar la renta, aunque Herrerín, que evitó que Cristiano Ronaldo ampliase más su cuenta goleadora y fue de los mejores de los suyos, lo evitó. Ibai Gómez puso algo de emoción en los minutos finales, pero los locales les superaron sin excesivos agobios.
El conjunto ‘merengue’ . ofreció un partido excesivamente atractivo en un horario que volvió a atraer a mucho público al Santiago Bernabéu. Enganchado a un Isco que está aliado con el gol en este inicio de campaña, y a una ‘estrella’ portuguesa que inauguró su cuenta de la campaña, más el esfuerzo de un Luka Modric diametralmente opuesto al del año pasado, superó a un rival resquebrajado por el primer tanto del malagueño, y que fue demasiado cándido en la capital.
Ancelotti sentó de inicio a Mesut Özil y dio la batuta en el medio a Sami Khedira y Modric, mientras que Valverde hizo lo propio con Ander Herrera, pretendido por el Manchester United, y con Óscar de Marcos, adelantando a Beñat a la mediapunta y situando en el once titular al recién llegado Mikel Rico. El conjunto vasco, bien colocado y sin renunciar al balón, desactivó el juego ofensivo local, y ni Cristiano ni Isco pudieron recibir balones para crear peligro en los primeros instantes del duelo.
Sin embargo, a ninguno de estos dos futbolistas les hace falta entrar demasiado en juego para demostrar su calidad. El de Madeira puso a prueba a Herrerín y, minutos después, una combinación iniciada por el luso y el andaluz acabó con un gran pase de Benzema al ‘23’ blanco, que no perdonó para tranquilizar al Bernabéu.
El gol aumentó el peligro local en los metros finales, mientras que dejó algo ‘tocado’ a los ‘leones’, que tuvieron la mejor ocasión en un lanzamiento a balón parado de Beñat. A pesar de esa oportunidad, la escuadra vizcaína ya no maniobraba con tanta facilidad y le costaba pisar el área de Diego López.
Además, el conjunto de Valverde recibió un duro golpe cuando el partido se prestaba a poner camino a los vestuarios. Una falta bien ejecutada por Ángel di María la cabeceó Cristiano Ronaldo, que cerró su sequía goleadora ante una de sus víctimas favoritas.
SENTENCIA A LA CONTRA. El técnico extremeño buscó la reacción en la segunda parte, retirando a su pareja de mediocentros para meter al joven Erik Morán y al polivalente Óscar de Marcos, retrasando a Beñat, mientras que el Real Madrid continuó sin controlar el juego, pero con la amenaza de su letal contragolpe.
Los minutos fueron pasando y el choque seguía ‘adormecido’. Los de Carlo Ancelotti, apoyados en el estajanovista trabajo de Modric, aguantaron sin excesivos problemas a su rival, esperando que éste se abriese definitivamente para sentenciar el enfrentamiento al contragolpe. La lógica se impuso, nuevamente ejecutada por el inspirado Isco, que no desaprovechó otro buen pase de un Benzema que parece que despierta, pese a la enorme división de opiniones que despertó en el estadio.
A partir de ahí, el Real Madrid, con Jesé en el campo, pudo aumentar la renta, aunque Herrerín, que evitó que Cristiano Ronaldo ampliase más su cuenta goleadora y fue de los mejores de los suyos, lo evitó. Ibai Gómez puso algo de emoción en los minutos finales, pero los locales les superaron sin excesivos agobios.