domingo, 27 de septiembre de 2015

Domingo 27 de Septiembre 2015
LA MALA SUERTE Y EL ARBITRO DAN EL EMPATE AL MALAGA
                                      REAL MADRID 0  MALAGA 0
El Real Madrid   y la mala suete  no han podido perforar la porteria del Malaga   en un encuentro en el que el guardameta Carlos Kameni se erigió como ángel de la guarda del conjunto de Martiricos.
Ni el buen momento de forma que atravesaba el francés Karim Benzema, que acumulaba cuatro partidos consecutivos marcando, ni el hambre de Cristiano Ronaldo por alzarse con el distintivo de máximo anotador en la historia del conjunto blanco, privaron a Kameni de marcharse de Chamartín subido a los hombros de sus compañeros. El Real Madrid, con 30 remates, perdió contra el Málaga la precisión que tanto le ha caracterizado.
Con Jesé Rodríguez partiendo desde el inicio, como sucediera en Gijón durante la primera jornada, y sin Pepe, con molestias musculares, ni Sergio Ramos, aquejado de una luxacion de hombro contra el Shakhtar en 'Champions', Benítez confió su bien más preciado, el de la seguridad defensiva, a la pareja de centrales Nacho Fernández y Raphael Varane,.
El partido el Real Madrid  se noto el cansancio del partido de Bilbao . se convirtió en un equipo  y muy previsible frente a un Málaga bien posicionado, solidario en las ayudas y que tan solo se acercó al marco de Navas con el balón parado. Sin ideas, recurrieron a centros laterales que no llegaron a buen puerto. Únicamente Cristiano Ronaldo, desde la posición de nueve, puso en riesgo el cerocerismo del marcador y, por ende, el aún vigente récord de Raúl González Blanco.
Con Isco que en la tarde de ayer no estuvo muy afortunado en su pases  y el croata Luka Modric  plagado de hombres en la marca, apareció Jesé Rodríguez para animar la tarde a un público exigente . De las botas del canterano llegaron las mejores opciones blancas que obligaron a Kameni, muy solicitado frente a la insistencia local, a realizar dos estiradas para conservar el empate hasta el descanso.
En la segunda  parte  coincidiendo con la presencia de un centrocampista más --Kovacic ocupó el puesto de un lesionado Jesé-- sobre el terreno de juego y atosigó a un Kameni que tuvo mucha faena en su área. Se juntó el Madrid por dentro y así nacieron las mejores ocasiones por medio de un Cristiano que no acertaba a encontrar el fondo de la red.

En los compases finales aplicó el Real Madrid ese plus de necesidad que se necesita para ganar los partidos y el encuentro adquirió los tintes propios de una película clásica del Oeste. Kameni estuvo cerca de pasar de héroe a villano al tragarse un manso disparo de Benzema que evitó Weligton que acabara en gol y Amrabat, expulsado con roja directa, se ganó el papel de malo del pueblo al desenfundar el codo sobre el rostro de Marcelo.